29 de agosto de 2012

Carta a Mauricio Abu-Gosh, Presidente de la Federación Palestina de Chile


Señor Mauricio Abu-Gosh
Presidente de la Federación Palestina en Chile
Presente

De nuestra consideración:

Como Coordinadora para el Boicot a Israel en Chile y mediante la presente misiva queremos manifestar nuestro público apoyo a las declaraciones realizadas por el Presidente de la Federación Palestina en Chile, señor Mauricio Abu-Gosh, en respuesta a los dichos del Presidente de la Comunidad Judía de Chile Shai Agosin respecto del supuesto “deterioro de las relaciones” palestino-israelí en Chile. Dichas declaraciones han tenido repercusiones que no podemos ignorar, y ante las reacciones de la Embajada de Israel durante la jornada del día lunes 27 del corriente, quisiéramos denunciar las permanentes estrategias de obliteración y ocultamiento del propio régimen de Apartheid y genocidio que el Estado de Israel practica diariamente.

En primer lugar, llama la atención la consigna vertida por Agosin: "El antisionismo es el nuevo antisemitismo". El primer termino hace referencia al rechazo del sionismo, movimiento político que promueve el establecimiento del pueblo judío en “tierra de Israel”, pasando por encima del pueblo palestino, violando los derechos humanos y el derecho internacional. El segundo término hace referencia a la hostilidad hacia los judíos como grupo generalizado, por su religión, raza y cultura. El antisionismo condena un movimiento político, no al pueblo judío por su origen, y ser antisionista no equivale a ser antisemita, lo cual queda demostrado con la existencia de individuos de origen judío que se hacen llaman judíos “antisionistas”, es decir, que condenan el sionismo. Este es el caso de la Red Internacional de Judíos Antisionistas presente en España, Argentina y Cataluña, Jews for Palestine, o Boycott from Within, que es un grupo de ciudadanos israelíes que se suman al llamado por el Boicot.

Con esta afirmación se busca desprestigiar a los que condenan el sionismo, asociando su actuar con prácticas antisemitas, para así apelar al inconsciente colectivo y victimizar a los que actualmente son victimarios. Sin embargo, los que condenamos el sionismo y las políticas de apartheid y genocidio del Estado de Israel, estamos al tanto de que muchos judíos no comparten esa actitud nacionalista y racista. Estar en contra de Israel no es estar en contra de los judíos; es estar en contra, repudiar y denunciar el régimen de apartheid y genocidio palestino.

También llama la atención, la preocupación manifestada por el dirigente de la Comunidad Judía acerca de la penetración en el norte de nuestro país de células radicales islámicas, y su intento de vincular esto con la acción pública de condena al Apartheid israelí. Al respecto, debemos señalar, en primer lugar, que la colectividad palestina de Chile es en su gran mayoría (sobre 90%) de origen cristiano, por lo que intentar vincular a sus organizaciones que defienden los derechos de su pueblo de origen con el radicalismo islámico es una manipulación mediática, que se aprovecha de la ignorancia, desinformación y confusión que los medios de comunicación contribuyen a reafirmar, el hecho de asociar inmediatamente árabe con musulmán o islámico. En segundo lugar, el mismo tema del radicalismo islámico habría que ponerlo en cuestión, ya que se trata de la referencia vaga y ambigua a una multiplicidad de grupos políticos, no todos necesariamente violentos, y en los cuales el apelativo de radicalismo encaja de manera muy errónea y equívoca, que por lo demás, en muchas ocasiones se enfrentan entre ellos; da cuenta de esto la disputa de intereses que se juega hoy en Siria entre Arabia Saudí (promotora del wahabismo) e Irán (promotora del chiismo revolucionario del Ayatollah Jomeini) por una hegemonía en la región.

Las declaraciones de la Embajada de Israel difundidas por el Diario La Nación durante el día lunes 27 de Agosto, en respuesta los dichos del Presidente de la Federación Palestina van por la misma línea de la manipulación, que además es la estrategia diplomática israelí a nivel internacional. Al acusar a Mauricio Abu-Gosh de tener un discurso de “tono iraní”, refleja la estrategia israelí de desviar la atención hacia Irán como un peligro nuclear en la región y promover una acción bélica en su contra, poniendo así un velo sobre el régimen de Apartheid que Israel ha instalado en Palestina.

En este mismo sentido, algo que ha irritado tanto a la Comunidad Judía como a la Embajada de Israel, fue la frase del dirigente chileno palestino que decía “los nazis se quedaron chicos en comparación con los sionistas”, algo que incluso causó irritación en la propia prensa israelí. Debemos señalar al respecto que, los dichos de Mauricio Abu-Gosh sobre el tema no se alejan de la realidad: Israel en más de sesenta años de ocupación ha llevado una política de limpieza étnica, segregación racial y territorial, que incluso, según un informe de expertos del grupo sobre Apartheid de la Universidad de Johannesburgo (Sudáfrica), han calificado como un régimen de Apartheid incluso peor que el ex sudafricano.

Dicho lo anterior, nos parece necesario reafirmar la necesidad de la campaña de Boicot, Desinversión y Sanciones (BDS), que insta al reconocimiento y valoración de los Derechos Humanos en Palestina mediante la presión internacional a Israel. Relevamos la necesidad urgente de que Israel cumpla con el Derecho Internacional, termine la ocupación de Palestina, respete el derecho al retorno de los refugiados palestinos y dé plenos derechos a los palestinos ciudadanos de Israel.

Manifestando nuevamente nuestro apoyo, saluda atentamente a usted

Coordinadora para el Boicot a Israel en Chile (BDS Chile)